MÉXICO.- El alcalde Óscar Ramírez Aguilar fue atado a un árbol y golpeado por un grupo de manifestantes.
El violento episodio sucedió cuando el jefe comunal se aprestaba a inaugurar una obra muy esperada por los vecinos del municipio de Frontera Comalapa, en Chiapas: un tanque de agua para toda la comunidad, deseosa de tener por fin agua potable.
Todo marchaba muy bien en el barrio La Jimba. Ramírez Aguilar era conocido por sus promesa de campaña en la que había anunciado viviendas de calidad y una obra de potabilización del agua para una de las zonas más postergadas del sur de México. Hasta que uno de los vecinos notó que algo no cerraba.
Los habitantes de Frontera Comalapa que se habían acercado al acto notaron que el tanque prometido no era de calidad. Es más, denunciaron que estaba construido con “un material inadecuado” para este tipo de obras.
Según el portal de ese país Cuarto Poder, los vecinos constataron que el tanque se encontraba “en pésimas condiciones y mal hecha, toda vez que parte del piso se encontraba ‘emparchado’. Las filtraciones, denunciaron, serían inevitables. La obra debería surtir de agua a 11 barrios del municipio, lo que había generado enormes expectativas en la población.
El enojo de la gente fue creciendo a medida que exigían explicaciones. Las protestas subieron de tono hasta que alguien trajo una soga. Los vecinos se le fueron encima al alcalde, lo amarraron y lo ataron a un árbol cercano.
El alcalde estuvo dos horas atado hasta que fue liberado por los pobladores
El alcalde intentó en vano brindar explicaciones, pero los vecinos se negaron a liberarlo hasta que garantizara el arreglo de la obra y que prometiera que sería inaugurada, a la mayor brevedad y en excelentes condiciones.
Las negociaciones duraron dos horas. Los pobladores lo dejaron ir solo después de que prometiera “arreglar” el tanque. Y si bien no sufrió lesiones ni lastimaduras, más allá de alguna raspadura por las sogas, debió soportar la ira ciudadana ante el temor de la posibilidad de un linchamiento.
Finalmente el alcalde fue liberado y aclaró en su cuenta de Facebook que todo se trató de una “reunión de trabajo con los pobladores”, según consignó Cuarto Poder.
Frontera Comalapa ha sido gobernado en los últimos seis años por los hermanos Carlos y Óscar Ramírez Aguilar. En las elecciones previstas para junio próximo, el primero de ellos pretende lanzarse como candidato para la sucesión de su hermano.
Sin embargo, los pobladores denuncian que el municipio se encuentra abandonado en cuanto a obras de impacto y de primera necesidad.